Marcelo Moretti levantó su licencia y retomará la presidencia de San Lorenzo tras meses de ausencia por el escándalo de coimas

Marcelo Moretti volverá a ocupar la presidencia de San Lorenzo tras concluir la licencia que había solicitado hace poco más de tres meses. El regreso del dirigente, elegido en diciembre de 2023 por los socios azulgranas, fue formalizado a través de un correo electrónico enviado al club, notificando su intención de retomar la conducción y convocando a una reunión de Comisión Directiva para el próximo lunes. Este retorno se da en un contexto convulsionado para la institución, atravesada por una profunda crisis económica y una inestabilidad política que no da respiro.

La licencia de Moretti fue tomada en abril, inmediatamente después de la difusión de un video grabado de manera oculta, donde se le ve aceptando 25.000 dólares de parte de la madre de un juvenil de las divisiones inferiores. El escándalo por presunta corrupción detonó una crisis interna y lo forzó a apartarse temporalmente del cargo, mientras la opinión pública y la dirigencia debatían su continuidad. Desde entonces, Julio Lopardo, vicepresidente primero, asumió la presidencia en funciones, pero su gestión no logró traer paz al club y recientemente presentó su renuncia a la vicepresidencia, agravando aún más el escenario institucional.

El regreso de Moretti no solo reabre heridas dentro de la comisión directiva, sino que también genera desconcierto e incertidumbre entre los hinchas y socios. Algunos dirigentes cuestionan la conveniencia de su vuelta, sobre todo después de las renuncias y tensiones que enfrentó el club en los últimos días. La figura de Moretti resulta polarizadora: mientras busca recuperar el control, parte del cuerpo directivo pone en duda la legitimidad de su regreso y evalúa escenarios alternativos, incluyendo la posible acefalía si se produjeran más dimisiones masivas, lo que obligaría a convocar a elecciones anticipadas.

En paralelo a la crisis política, San Lorenzo mantiene una performance competitiva aceptable en el Torneo Clausura, aunque la situación institucional amenaza con socavar la estabilidad del plantel profesional. La continuidad del proyecto deportivo queda irremediablemente atada al desenlace de la interna dirigencial, que sigue sumando capítulos de incertidumbre con cada movimiento de Moretti y el resto de la cúpula.

La reunión del lunes será clave para definir el rumbo inmediato del club. Allí, la Comisión Directiva deberá formalizar el retorno de Moretti y, probablemente, tratar las consecuencias políticas de las recientes renuncias, incluyendo la de Julio Lopardo. La incertidumbre sigue siendo la única certeza en Boedo, donde la crisis parece lejos de encontrar un desenlace definitivo y la figura del presidente, ahora rehabilitado, sigue en el centro de todas las miradas.