Recaudación total del amistoso entre la Selección mayor y la Sub-20 por Bahía Blanca: 651 millones

En un gesto de solidaridad y unidad, la Selección Argentina de fútbol llevó a cabo un amistoso benéfico contra su contraparte Sub 20, con el objetivo principal de recaudar fondos para ayudar a las víctimas de las devastadoras inundaciones que azotaron la ciudad de Bahía Blanca. Este evento, que se celebró el sábado 22 de marzo en el estadio Tomás Adolfo Ducó del club Huracán, fue un claro ejemplo de la comprometida respuesta de la comunidad deportiva argentina ante la adversidad.

El partido, que finalizó con una victoria de la Selección mayor por 2-0, gracias a los goles de Ángel Correa y Nicolás Paz, atrajo a una multitud de aproximadamente 15,000 personas que llenaron las gradas del estadio. Los precios de las entradas, accesibles para el público, fueron fijados en $20,000 para las populares y $30,000 para las plateas, lo que facilitó la participación de un gran número de hinchas que querían contribuir a la causa.

La recaudación del evento fue destinada al Hospital Penna de Bahía Blanca, una institución que sufrió significativas pérdidas materiales debido a las inundaciones que afectaron la región. Las inundaciones, que ocurrieron en las semanas anteriores, resultaron en la muerte de más de 10 personas y causaron incontables pérdidas materiales, lo que hizo necesaria una respuesta solidaria de toda la sociedad argentina.

La Asociación del Fútbol Argentino (AFA) jugó un papel crucial en la organización de este amistoso solidario. En una conferencia de prensa encabezada por el entrenador Lionel Scaloni y los jugadores Lautaro Martínez y Germán Pezzella, se confirmó la disputa del partido y se detallaron los esfuerzos para recaudar fondos. La AFA, junto con los jugadores y el público, demostraron una vez más el poder del fútbol para unir y ayudar en momentos de necesidad.

El ambiente en el estadio fue de respeto y aplauso, con los espectadores mostrando su compromiso con la causa sin cantar las habituales canciones de apoyo a sus equipos. En lugar de eso, el clima fue marcado por la solidaridad y el apoyo mutuo. Al final del partido, los jugadores de la Selección Argentina regalaron pelotas al público, un gesto simbólico que reflejó la conexión entre los jugadores y los hinchas en esta movida solidaria.

La recaudación total del evento, aunque no se detalla en el artículo original, es un testamento del esfuerzo colectivo y la generosidad del pueblo argentino. Este amistoso benéfico no solo ayudará a reconstruir el Hospital Penna, sino que también servirá como un recordatorio de la importancia de la solidaridad y el apoyo comunitario en tiempos de crisis. La Selección Argentina, una vez más, ha demostrado que su impacto trasciende el campo de fútbol, llegando a los corazones y necesidades de la comunidad.