Maxi Salas pagó la cláusula de rescisión y se convirtió en nuevo jugador de River

Se terminó el culebrón: Maximiliano Salas ejecutó la cláusula de rescisión y su futuro inmediato está en River Plate. El delantero, que hasta hoy era una pieza clave en el equipo dirigido por Gustavo Costas, decidió dejar Racing y cambiar de camiseta luego de semanas de rumores, versiones cruzadas y una tensión creciente entre los dirigentes de ambos clubes y el propio futbolista.

La traba principal en estas últimas horas giró en torno a la activación de la cláusula de rescisión que figuraba en su contrato con Racing. Salas, quien había llegado a Avellaneda a principios de 2024 por pedido expreso de Costas, finalmente depositó los 8 millones de euros estipulados, allanando de ese modo su salida del club de Avellaneda en dirección a Núñez.

Su partida no fue sencilla ni exenta de polémica. Salas, que en Racing disputó 76 partidos, convirtió 13 goles y repartió 9 asistencias, fue categórico al responder algunas versiones mediáticas. A través de redes sociales, dejó en claro su malestar con parte de la dirigencia, en particular con Diego Milito, a quien acusó de maltrato y de no haber atendido su reclamo de mejora salarial, factor que terminó por impulsarlo a tomar esta decisión.

La operación despertó reacciones de todo tipo. Se hicieron sentir tanto las muestras de apoyo de excompañeros, como la desazón de los hinchas de Racing al ver partir a uno de los hombres que aportó dos títulos a la Academia en su corto pero intenso paso. Para el entrenador, el golpe es duro: Costas pierde a su delantero titular justo antes de un compromiso importante por Copa Argentina y de cara al tramo definitorio del torneo local.

Ahora, la atención estará puesta en el desembarco de Salas en River Plate, donde en las próximas horas firmará contrato y comenzará a trabajar bajo las órdenes del cuerpo técnico millonario. La novela llegó a su fin, pero la trama promete seguir dando que hablar: el pase de Maxi Salas, uno de los más resonantes de este mercado, marca un nuevo capítulo en la rivalidad entre dos de los clubes más grandes del país.